Letra de No sabes cuanto te quiero, Albert Saenz



Esta amaneciendo 
que paz refleja tu cara sobre la luz 
ya es casi la hora de empezar un nuevo día 
y la verdad, reconozco que no me gusta nada madrugar 
quizás sea esa la razón por la que tengo tan mal despertar 
te agradezco tanto que cada mañana me regales tu primera mirada 
tu sonrisa y que me digas "Buenos Días mi Amor" 

Me encanta mirarte cuando me preparas el café 
te preocupas tanto de lo mío, que se te olvida 
y no te importa que el tuyo se este quedando frío 
siempre piensas antes en mi que en ti, Siempre 

Y no sabes cuanto te quiero 

Necesito ese beso, ese beso tuyo de ayer, de hoy, de siempre 
ese beso que me das cuando me marcho y cuando regreso 
cuando llego a casa tarde, cansado y con problemas 
y tu me recibes con los brazos abiertos 
me ayudas, me oyes y sobre todo me escuchas 
y eso alivia mis penas 

Hoy desperté abrazado a ti, me gusto tanto mirarte 
tenias los ojos cerrados a la luz y la mente abierta a los sueños 
tu cuerpo, completamente desnudo 
mis manos parecían tener alas, se me escapaban 
volaban hacia ti, te deseaban 
y te acaricie de los pies a la cabeza una y otra vez 

No sabes cuanto te quiero 

Hay veces que no nos hacen falta ni las palabras 
para entendernos, nos basta con mirarnos 
y si por alguna tontería discutimos 
acabamos encontrándonos, donde mas cerca nos sentimos 
mas unidos... nuestra cama 

Si nos va bien o mal yo a tu lado y tu al mío 
juntos, fundidos como arena y cal 
como agua del mismo río, hay quien no entiende este amor 
hay quien nos da la espalda, que mas nos da 
si tú y yo sabemos que cuando nos conocimos 
decidimos echar el ancla. 

Te he sentido tantas veces cuando a media noche te levantas 
me miras y me mimas como si aun fuera un crío 
pareces adivinar que estoy sintiendo frío y me echas otra manta 
me gusta como me tratas y me gusta como me amas 
eres el mejor regalo que me ha dado la vida 

No sabes cuanto te quiero 

Compartes todas mis cosas, todo lo que se puede sentir 
cuando de verdad se ama 
en esos momentos de entrega tuya y mía 
donde solo hay un testigo que nos mira 
calla y guarda nuestra intimidad... 

Nuestra cama...

Mas letras de Albert Saenz: