Estuve leyendo
tus viejas cartas
donde me hablabas de amor.
Usando palabras
querías decirme
ya no puedo estar sin vos.
Y dónde quedó ahora
esa hermosa ilusión
de regalarte a vos
lo mejor de mi amor.
Creímos que todo
había cambiado
no había razón
ya para estar mal.
Pero el otoño
golpeó nuestra puerta
y como una hoja
nuestro amor murió.
Y dónde quedó ahora
esa hermosa ilusión
de regalarte a vos
lo mejor de mi amor.
A veces los sentimientos
no se pueden manejar
y cuando nos atrapan
no podemos escapar
Y es así, nuestro corazón sufre.
Y sigue y sigue dando vueltas
y vueltas, la loca rueda de la vida.
Y sigue rodando en mi cabeza
el enigma cautivante del tu voz.
Y dónde quedó ahora
esa hermosa ilusión
de regalarte a vos
lo mejor de mi amor.