ARPÍA
Yo paso la vida, muy triste pensando
porque me detuve, para conocerte,
a ti nada más.
Yo tuve la culpa, por haberte amado
si eres una arpía, que la vuelta la esquina
me ibas a olvidar.
Te sueño, te nombro, te sigo queriendo,
tú ya no me quieres y siempre me dejas
temblando de amor.
Viviré sin alma, seguiré pecando
porque me devuelvas, todita la sangre
de mi corazón.