AVE DE PASO
Yo seré en tu vida
un ave de paso,
que en la primavera
su nido formó.
Más llegar el otoño
y pronto se olvida,
del ave que un día
su canto nos trinó.
Tú en cambio me dejas
en mitad del pecho
cuál crucificado
un terrible amor.
Un amor tan grande
que solo la muerte
arrancarlo puede
de mi corazón.
No te hago reproche
porque soy sincero
de las bellas horas
que me dio su amor.
Tan solo te pido
que si muero pronto
pongas en mi tumba
una blanca flor.