Vengo a refugiarme a tu habitación, la noche es muy fría busco tu calor.
No escondas la mirada, no vengo a pedir nada.
A nadie le importa si te quiero o no, si siento alegría o siento dolor,
o si no siento nada o necesito oír tu voz ahora que estoy peor.
Ya sé que de nada me sirve llorar, tú no te preocupes que no lo verás,
me quemo para dentro y puedo estar riendo o no, pero algo va mejor, va mejor.