Letra de Hombres de plomo (Con Frank T y Doble H), Korazón Crudo
Madrugo, y el sentir es similar a golpes en los pómulos. A veces me desplomo, cómo no, hombre de plomo lleva una vida trabajando y apenas tiene bártulos. Relojes controlan mis horarios,
empresarios se creen que controlan movimientos.
Pensamientos los controlan mis deseos. Calendarios
de conciertos me hacen volar en mi jornada laboral,
las nubes me inspiran cuando me quedo en la parra,
y dibujan cosas bonitas como chicas sonriéndome en la barra.
Hombre de plomo es aptitud, no gasta palabras que no hablan de nada. A hombre de plomo le brilla la mirada, rectifica sus pisadas, gana batallas con una buena retirada. La ética de un hombre de plomo es sagrada, luego se respalda por cada acción recibida, rara vez en ésta vida pierde compostura. A éstas alturas para qué negarlo, es de plomo, no es de piedra, y Elsa Pataky me la pone dura.
Estoy aquí con Frank T y con Doble H. Ejemplo de constancia, dedicando mi vida, mostrando mis respetos por ésta movida. Palmo a palmo, a veces con los labios apretados y la frente contraída. Mi alma es underground, sé que es algo suicida en un mundo en el que usamos maquillaje; teatro en el que puede que no encaje. Traje mis dudas y el coraje para resolverlas, echando el resto, sudando el puesto; mitad honesto, mitad molesto. Mi fórmula se reduce a ésto, corazón y textos.
Que no es tu falta, es mi error, son mis fallos los causantes, los motivos principales de mis temores. Hasta el hierro podría acabar fundiéndose, el plomo hundiéndose, el hielo derritiéndose, el fuego extinguiéndose. Pero siempre hay secuelas, y si no hay nuevas pruebas,
da igual que la distancia sea más larga. Pónme carga, que a éstas alturas uno ya acaba acostumbrándose a beber de esas jarras, sean dulces como amargas.
Cuento contigo, para lo bueno y para lo malo, me tengas en cuenta o me ignores, me alegres o decepciones. Aprendemos a calibrarnos con todo eso y con aquello, aprendemos a continuar aunque estemos hasta el cuello. Mira el Hip-Hop, y luego míranos, aún seguimos. Lo construimos, lo hicimos, lo vivimos, y más lo sentimos. Una vida dedicada por ésto, y de ésto yo como. Korazón Crudo, Doble H, Tekafran; hombres de plomo.
Resulto un tipo flexible, que no elástico. Fundo con los del vino de cartón lo mismo que con los del vaso de plástico. Gasto una aleación de sentimientos enfrentados; amor, odio, orgullo, baja estima pelean por el mismo podio
mental. Sorpresa. Soy un hippie de paisano
cada vez más informado, un pesimista. Pásale revista a éste un idealista que se auto contraindica. Porque a ratos, la sarna, con gusto, pica a éste lado de la cama.
Cuenta hasta diez y respira antes de ponerte en mi piel, ¿sabes que es tóxica como esa nube? Me trajo ésta suerte de tormenta mental; vértigo, insomnio, simula una muerte cerebral. Resisto la corrosión de tiempos de confusión, creo dejando el café y dándome a la menta poleo y otras infusiones. Transfusiones de nuevos ánimos, hombre de plomo está por hacer, quiere ser magnánimo.
¿Entiendes de qué pasta estamos hechos?, ¿y por qué no puedes verme a través? Porque así es como saco pecho. Que más que por asomo, amor a uno mismo es aplomo. Si todavía te preguntas por qué, cuándo, dónde y cómo, hombre de oro.