Mi Historia
Un padre y una madre se alegraban pues nacería su primer bebe,
de alegría la pareja se llenaba pues en vez de dos ahora serían tres. Pero
mientras esos padres se gozaban el enemigo tendía su red sutílmente y ágilmente
como siempre puso una enfermedad mortal en el bebé.
Dígame doctor que hay
que hacer si es necesario doy mi vida por él, la madre de rodillas ante Dios
hizo un pacto de oración ante el y le dijo si tu le das la vida prometo te lo
entregaré te daré su vida para siempre que te sirva a tí como Ana dio a Samuel.
Coro:
Y ese niño era yo quien no iba a crecer pero mis padres tocaron el
manto del señor con fé en oración y ese niño era yo, y vivo para contar que hay
un padre verdadero que es mi amigo fiel y de el yo siempre cantaré.
Quizás
contigo no tenga nada que ver la historia del bebé, pero aquí todos tenemos
experiencias buenas y malas a la vez.
Pero cuando más oscuro es el camino
más cercano está el amanecer cuando Dios está de nuestro lado ya no hay de qué
temer.
Esta historia no salió de un cuento es real como la ves, para decirte
que hay un Cristo verdadero que anda con nosotros siempre.
El pelea las
batallas de sus hijos el nunca los deja perecer en los momentos más difíciles
tu puedes acudir a él con fé como los padres del niño aquel.