Llega tarde el 28, nerviosa miro el reloj, la lluvia conmigo empieza un día de pleno sol. A lo mejor aparece el recuerdo de un amor. No me ve, camina ausente, hace mucho que pasó.
Empecé a recordar, y pasé por mi mente, y encontré
aquel rincón que te dejé, donde guardo los momentos que no olvidé.
Revivo aquella noche en que olvidamos lo demás,
el cielo se volvió rojo, al sol vimos bostezar. Se ha perdido entre la gente, me he perdido yo también. Ya se ha ido el 28, la memoria de un ayer.
Empecé a recordar, y pasé por mi mente, y encontré
aquel rincón que te dejé, donde guardo los momentos que no olvidé.
Si quiero saber, si tú también, recuerdas algo de aquel café, espero a veces sin entender por qué.